Tras reír, pensar. Había que dibujar un sombrero, pero justo al revés. ¿Cómo es eso? ¿Un sombrero que se pone en los pies? No. ¿Un sombrero con la abertura hacia arriba? Ummm, más o menos. ¿Para qué sirve un sombrero? ¡Para taparnos la cabeza! Pues el sombrero que los talleristas tenían que dibujar tenía que servir justo para lo contrario: para mostrar lo que tenían dentro de la cabeza. ¡Y es verdaderamente soprendente todo lo que tienen dentro!
. sombrero-fortaleza de Mikel
(para poder estar solo cuando lo necesitara)
sombreros de Nayeli: flores, corazones y la torre Eiffel
(para viajar en primavera)
sombrero de Quemo
(flores para celebrar la primavera y una vida nueva)
sombrero de tomás
(misterios que quieren escaparse hacia afuera.
¿A curiosear el mundo?)
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sombrero de Marina
(está claro cómo se siente)
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sombrero de Lucía
(una flor y un corazón alegre)
. sombrero para viajar de Leo
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sombrero para volar, de Jose
. sombreros de Eneko txiki
(monstruos orginales, pícaros y simpáticos)
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sombrero de flor de Cristina
sombrero-paraguas de Chiara
(¿contra la tristeza?)
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sombrero de Ander
(¡lleno de misterios!)
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sombreros de Ainara, alegría y tristeza
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sombrero-pantalla de Samuel
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