Una vez más, el gran Calder y su circo prodigioso. Esta vez les propusimos a los talleristas que trabajaran con cables y alambres, además de con otros materiales más familiares para ellos, para construir personajes u objetos, a la manera de Alexander Calder. Ver el trabajo del escultor estadounidense sirvió de inspiración a muchos y desde luego, a todos nos hizo sonreir.
Alexander Calder es conocido en el mundo entero por sus esculturas móviles, algunas de gran tamaño. Su obra revela un espíritu alegre, abierto y muy divertido. Al final de su vida Calder tenía el pelo completamente blanco, llevaba casi siempre una camisa roja de franela (el rojo de tantas de sus esculturas) y reía a mandíbula batiente, o sea, que era algo a medio camino entre un Papá Noel surrealista y un experimentado obrero del metal y el alambre.
lunes, 16 de noviembre de 2009
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